noche grave y no gritar
los tobillos gastaban eslabones
una baldosa sin papel
nariz sobre pelo sobre boca
tenían látigos en la lengua
eran sombras del frío
las cadenas temblando
huesos vivos tiraban
como huesos muertos
sinfonía de pasador y humedad
ni dios en la ventana ni ventana
una baldosa del país
No hay comentarios:
Publicar un comentario